miércoles, 26 de octubre de 2011

¿Votos perdidos?

‘¿Por quién va a votar?’, ‘Por Carlos Galán’, ‘Huy, ¿va a perder el voto?’

Esa conversación la he tenido varias veces durante las últimas semanas; con las elecciones locales tan cerca y el cubrimiento cada vez mayor de los medios de comunicación, es inevitable hablar de candidatos, política y votos.

Mucha gente piensa que votar por un candidato que vaya mal en las encuestas es perder el voto. Esa misma gente, desgraciadamente una gran mayoría de colombianos, prefiere votar “en contra de…” en vez de votar “a favor de…”. ¿Qué es realmente perder el voto? Perder el voto es perder la oportunidad de mostrar su punto de vista a conciencia sobre que opción creé que es la más acertada para el país, el departamento o la ciudad en la que vive. En ese sentido, usted pierde más su voto si se lo da a alguien que no lo convence tanto sólo porque tiene más posibilidades de ganar que el que sí lo convence.

Las encuestas muestran una tendencia, es cierto, pero ese juego de encuestas es un círculo vicioso en el cual la gente deja de ver otras opciones, que generalmente son mejores que las que van arriba, sólo porque no puntean. En ese sentido cada encuesta es profundización de la anterior, a menos que pase algo extraordinario (como una alianza).

La mentalidad de que un voto por un candidato que a uno lo convence, pero que no va a ganar es un voto perdido, es la que hace que sean elegidos presidentes como Andres Pastrana o alcaldes como Samuel Moreno. El voto debe ser a conciencia y por las propuestas que uno considere convenientes. Jugar a votar por favoritismos o por ‘no perder el voto’, echa al traste el concepto de democracia, de por sí ya muy pisoteado en el país.

En esta campaña a la alcaldía de Bogotá, ese pequeño defecto democrático es el pan de cada día. “Yo quiero votar por Aurelio, pero con tal que no gane Peñalosa, voto por Petro”, “¡Petro!...no, será votar por Peñalosa para que no gane ese man, aunque me gusta más Luna”… Si usted no considera que Petro ni Peñalosa tienen buenas propuestas para ser alcaldes, pues no vote por ninguno de ellos, está la opción de otros 6 candidatos que presentaron su nombre.

Reflexione sobre que es de verdad perder el voto. Si queremos una democracia de verdad representativa y funcional, una primera medida es votar por quien lo convenza, sea quien sea, así no tenga opciones reales de ganar; tal vez si todos lo hicieran así, los buenos candidatos que ‘no tienen opción’, la tendrían.

2 comentarios:

  1. Es cierto, el colombiano tiene como esa "presión social" cobarde de siempre que le dice que si no se alía a la campaña de los mas fuertes, o a la campaña de "los duros" de las encuestas, no es nadie, o está haciendo el ridículo seguro. Esa cobardía social nos tiene jodidos...

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  2. Absolutamente de acuerdo, y me parece una visión muy tierna de la democracia colombiana, pero en una ciudad amenazada por la sombra de un presidente que hizo y deshizo con las instituciones, los derechos humanos y con la legalidad, yo voto por Petro, para que no gane Peñalosa, para mí es una victoria más importante no reelegir el terror, que a que a Galán le devuelvan buena plata de su campaña y quede perfilado para las próximas elecciones.

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