Biografía no autorizada de José Vicente Guzmán Mendoza

Creo que es la primera vez que escribo en mi blog el día de mi cumpleaños. Siempre he querido hacerlo para agradecer, porque cada año (sin excepción) quedo muy impresionado y abrumado por tantas muestras de afecto y cariño que a veces siento que no merezco. 

Pero escribo hoy debido simplemente a que uno de los regalos más bonitos que recibí fue una página de internet que me dedicaron y en la que me homenajearon (entienden ahora porque digo que no siento que no merezco tanto)... Si alguno quiere chismosear la página es esta: http://josevigm.webs.com/ 

Pero en fin... lo que me más me llamó la atención fue esta pequeña biografía que alguien escribio sobre mí (estoy seguro que con ayuda de mi hermano y de mis papás) y que me encantó porque pone pequeños detalles e historias que no todos saben... así que disfrútenla como yo lo hice:

Nací un 13 de Abril de 1988 en Bogotá, Colombia a las 10:13 am en la Clínica Palermo. Cuando nací, el parto tuvo muchas complicaciones porque venía enredado el cordón umbilical a mi cuello y eso casi causa que me asfixiara y muriese al nacer, pero afortunadamente las cosas salieron muy bien y pude salir del vientre de mi madre casi a los 10 meses por medio de cesárea pues me rehusaba a salir.

Al nacer fui un niño grande de tamaño y también de peso. Cuando mi hermano Manuel nació, unos 20 meses después, me sentí celoso de él pues se estaba llevando la atención de toda la familia y por eso me hacía pipí en casi cualquier parte de la casa, para llamar la atención y que me hicieran caso.

Luego, al momento de entrar al jardín de niños hice tremenda pataleta pues como todos, tenía miedo de entrar al colegio y alejarme de mi casa y mi familia, aunque fuese tan sólo por unas horas. Cuando me sentía muy feliz o me emocionaba, solía hacer sonidos como "Yupi Jeta" y movía mis brazos nerviosamente.

A los 7 años me quebré un brazo en el colegio durante el recreo y por tener miedo a ir a la enfermería no dije nada, hasta que mis abuelos se dieron cuenta de que estaba pálido y asustado, y fue cuando descubrieron que tenía mi brazo roto. En el colegio era un niño distraído, no ponía atención a las clases y resultaba ser incluso un poco fantasioso. Eso me costo algunas citas con el psicólogo y muchas terapias para solucionar mi "problema".

Como a los 8 años entre al Club Deportivo de los Millonarios, mi equipo favorito de fútbol, pero tiempo después me sacaron por no jugar tan bien XD, igual obtuve mi diploma.

Participé en muchas obras de teatro en el colegio y tomé muchas veces clases del mismo. También me gustaba la poesía, una vez declamé frente a todo el colegio "Aserrín Aserrán". Un tiempo después, cuando tenía 15 o 14 años fui a Unicentro a jugar bolos y cuando quise regresar a casa no pude por que me perdí, tomé un bus que no debía de tomar y me baje en una calle que no debía de bajarme, por lo que  mi familia pasó casi toda la noche buscándome hasta que llegue donde mi abuelita y lo único que decía era que la calle era muy peligrosa, que me habían querido robar y no se que tanta vaina.

Antes de querer estudiar Administración de Empresas, pensé en estudiar Comunicación Social porque quería ser periodista. De hecho mi familia pensaba que así sería, pero al final decidí estudiar la primera.

Generalmente cuando cojo el carro y se me apaga, le hecho la culpa a los peatones, al carro y a los otros coches. Recuerdo que una vez casi volteo el carro de papá por que me subí a un andén, pero afortunadamente eso no paso.

Soy muy despistado, pierdo mis sombrillas (que por cierto no me duran más de 1 mes) o las cartucheras o las chaquetas, ¡incluso hasta las maletas! Aunque no todo es tan malo como parece, tengo un muy buen hábito de la lecutra, me gusta leer mucho y escribir, aunque por pereza casi no lo hago. Soy muy soñador y me encanta la música, sin ella la vida no tendría sentido.

Actualmente soy Jefe de Casa de Hufflepuff en uno de mis hobbies llamado Hogwarts Colombia, un grupo de seguidores de Harry Potter (¡Me encanta!) en donde he encontrado a una gran familia de amigos y otra parte de las personas sin las que no podría vivir. En el mundo normal, trabajo en lo que estudié en una empresa muy famosa de seguros.